En la nota enviada por la asociación de bomberos voluntarios de Rawson, se indica que debido a la falta de ingresos por el aporte municipal que se abona a través del servicio eléctrico, el servicio corre peligro al no alcanzar para solventar los gastos corrientes.

La Asociación de Bomberos Voluntarios de Rawson, responsable institucional y administrativa del servicio de protección de vidas y bienes privados y colectivos de la capital del Chubut, atraviesa una comprometida situación desde mediados de este año como consecuencia de una caída, tan continua como peligrosa, de su principal sostén de funcionamiento interno.

El mismo señala «Nuestra entidad nació hace más de cuatro décadas para garantizar una demanda esencial de la población y contribuir al mantenimiento y crecimiento del cuerpo activo de bomberos voluntarios, principal destinatario del esfuerzo cotidiano, también totalmente desinteresado, de miembros de la misma comunidad que han conformado las sucesivas comisiones directivas.

Para atender este servicio público de seguridad ciudadana frente a incendios, accidentes y siniestros varios de distinto origen y asegurar las respuestas adecuadas, el Estado Municipal promovió en su momento la creación del mencionado cuerpo de servidores solidarios y, más tarde, transfirió el manejo administrativo a una asociación civil del mismo carácter.

    La tasa municipal de prevención contra incendios, pagada por todos los usuarios de energía eléctrica de la ciudad, se transformó hace treinta años en la solución adecuada para atender las exigencias mínimas de funcionamiento diario, respetando la obligación del uso de otros recursos de origen provincial y nacional para incorporación de autobombas y otros vehículos, renovación edilicia y equipamiento en general.

Este crecimiento profesional y material de los bomberos voluntarios de Rawson, que en la actualidad se exhibe con orgullo en la ciudad, tuvo siempre el acompañamiento de la comunidad en general, con muestras de respaldo y aliento por el trabajo realizado, en una mutua conjunción que se tradujo en un prestigio generalizado.

    En un contexto de generalizada crisis económica que fue acentuando la disminución de recursos y se irradió al conjunto de la sociedad, la Asociación de Bomberos Voluntarios de Rawson, sin embargo, ha ido agotando desde mediados de año las alternativas de financiamiento hasta llegar a estos días en los que un insostenible cuadro de escasez pone directamente en riesgo el mantenimiento de las guardias de recepción de llamados y convocatoria en las diferentes emergencias – núcleo de un servicio indispensable – por la imposibilidad de pago de haberes a los únicos e imprescindibles siete empleados rentados para esa tarea. Esta consecuencia se suma a otras ligadas directamente a la prestación cotidiana (pago de servicios, funcionamiento interno e insumos básicos).

Este cuadro de incertidumbre reconoce como causa la caída de una metodología de recaudación de los aportes de usuarios en sus facturas por consumo de electricidad, entre los que se encuentra el Estado Provincial que mantiene sus deudas a la Cooperativa de Servicios Públicos desde hace varios meses, además de un extendido proceso inflacionario que suma problemas y repercute directamente en los bolsillos de los restantes contribuyentes y una situación institucional muy especial del ente recaudador afectado por otros graves reclamos y se traduce al final en un preocupante escenario que obliga a la advertencia pública y a insistir en la solicitud de atención por parte de las autoridades, por sus posibles y graves consecuencias.

El Municipio de Rawson, responsable primario del servicio público de atención de incendios y emergencias en su ejido ha sido permanentemente informado de este complicado proceso, además de destinatario de pedidos para la búsqueda de soluciones concretas y de mejoramiento de los mecanismos de transferencias de los recursos destinados a los prestadores voluntarios de una responsabilidad de competencia comunal.

La Asociación de Bomberos Voluntarios de Rawson ha mantenido hasta ahora una posición de prudencia y a la espera de la respuesta oficial, pero al mismo tiempo no puede abandonar su obligación de rendición periódica de sus recursos presupuestarios ni de información permanente a la comunidad en general, principal destinataria de sus esfuerzos, procurando con este pronunciamiento alertar sobre el agravamiento de un asunto directamente ligado con una capacidad mínima de respuesta ante las posibles emergencias de una capital provincial de nuestro tiempo.

Por tales motivos, y sin ninguna pretensión alarmista gratuita, reclama la atención de las autoridades para superar esta contingencia, buscar las soluciones definitivas en forma conjunta y preservar los reconocidos niveles logrados de un servicio en riesgo creciente, que es producto del esfuerzo compartido de la comunidad de Rawson.