Medianas Empresas y entidades ruralistas exigen respuestas a los gobiernos nacional y provinciales, frente a la crisis que atraviesa el sector. Piden una intervención estatal que equilibre la cadena láctea y garantice que los tamberos reciban el porcentaje correspondiente por la materia prima. Un proyecto en Diputados promueve declarar la emergencia del sector.
Los faltantes de manteca, registrados con intermitencias en los supermercados y comercios , representan la última evidencia de la crisis que atraviesa el sector lechero de la provincia de Buenos Aires y la región central del país.
La problemática, que acarrea el estancamiento en la producción y un proceso de concentración de la producción y cierre de tambos, registrados en la última década; se agravó durante el primer semestre de 2016, debido a una fuerte suba de costos -principalmente maíz, combustibles y energía- y una serie de inundaciones en zonas de gran producción láctea, como Santa Fe y Córdoba.
En este marco, la baja de la producción se profundizó en los últimos meses, en porcentajes que oscilan el 20% en relación al mismo período de 2015; siendo la causa principal para la escasez de manteca.
- Ante un escenario de incremento del precio de la leche en las góndolas, los productores reclaman que no reciben valores proporcionales y aseguran que miles de vacas lecheras están yendo a faena. Si bien en junio las usinas mejoraron los valores pagados al productor, a un promedio de $ 4,12 por litro, el incremento es considerado insuficiente: el costo supera los $ 5.
El proceso apremia principalmente a pequeños tambos ya que mientras unas seis empresas grandes tienen una participación del 60% del mercado; el resto de la producción se canaliza por una gran cantidad de usinas lácteas PYMES, que tienen escasa incidencia en las decisiones del negocio.
El reclamo cada vez más unánime es equilibrar la cadena láctea, que incluye además de productores a usinas, transportistas, mayoristas y supermercados; los cuales se quedan con el porcentaje del valor en góndola que corresponde al tambero: 33%. De cumplirse esta histórica reivindicación, los tambos recibirían (a precios actuales) hasta $ 6,6 por litro y podrían subsistir ante este panorama.
La “emergencia”
Este fin de semana, tras un encuentro productores de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) emitieron un comunicado en el que pidieron a las autoridades nacionales definir políticas que permitan recuperar la rentabilidad del sector.
Con este fin, la CAME se refirió a la necesidad de sostener la quita de las retenciones a los impuestos al valor agregado (IVA) y Ganancias; en tanto que solicitó que desde Nación, las provincias y los municipios, se reintegre parte de los impuestos y tasas que perciben por la actividad. No obstante, no quieren que ese adicional sea subsidiado por el Estado, sino por los actores de la cadena de valor, con la finalidad de recomponer la ecuación de las fases productivas.
Finalmente, los medianos empresarios consideraron necesario declarar la emergencia del sector lácteo. Un proyecto que responde a este pedido fue presentado a fines de la semana pasada por el Vicepresidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados de la Nación, Juan Casañas.
“Es el Estado nacional el que tiene que tenderle una mano a los productores, especialmente a los más pequeños, para resguardar la producción nacional, el abastecimiento de lácteos en el mercado interno, estimular el desarrollo de las economías regionales y proteger los casi 85000 puestos de trabajo que la actividad genera”, dijo el diputado en declaraciones a Infocampo.